Good night moon

Ella camina sola por la calle oscura y se deleita con mirar a la fauna noctámbula que aparece apenas se abre la noche, le da un poco de miedo caminar así sola, pero es parte del juego.
Se cruza con todo tipo de personajes: los que andan de juerga, los que buscan una cama caliente donde pasar la noche, los que van o vienen de cumplir turnos de trabajo, ensimismados en sus dilemas cotidianos.
A veces da pasos cortos o largos, dependiendo de si está a gusto o le da un poco de miedo ciertas miradas o ciertas sombras ficticias. A lo lejos, se siente un murmullo de músicas mezcladas: algo electrónico, algo de salsa, algo metalero.

Sigue caminando porque de a poco el nudo en la garganta y en la boca del estómago comienzan a ceder y piensa….. en las vidas que desearía vivir: en alguna universidad extranjera y ella sentada en un banco extasiada ante una magistral clase de arte o de literatura. También se imagina paseando sin afán por los puentes de parisinos, por los campos italianos o bañándose en las aguas sensuales de las Islas Griegas.

Una música sensual y profunda la lleva a una academia de danza, se ve a sí misma ensayando con pasión, sudando y mirándose al espejo, admirando su cuerpo estilizado y tenso.
Las risas de un bar la llevan a querer ser parte de una cofradía de letras, unas pocas almas estimuladas por el alcohol y los versos febriles de una noche insomne.
Madrugar todos los días y dormir mientras el resto trabaja.

Claro que tampoco está nada de mal la figura de esa chica que se advierte por la ventana: está cocinando algo rico, huele a hierbas frescas, a especias. Un hombre la espera en el comedor ávido de probar sus platos, el vino rojo y aromático se trasluce en las copas, la música…..? mmm podría ser… Dido? o……..Shivaree?

La noche pasa y hay un minuto en que ya ansía volver a casa, allá la espera el traje de todos los días para ir a trabajar….